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viernes, 7 de abril de 2017

La Pelota no se mancha


Mala Tuya cierra Lanzamiento 2017 de Pelota al Medio
El programa Pelota al Medio a la Esperanza del Ministerio del Interior cumplió 7 años. Desde aquella mañana del 11 de junio de 2010 en el Liceo Fránces -cuando comenzó a germinar la semilla- hasta hoy, han pasado varios miles de jóvenes liceales que han hecho del programa una efectiva herramienta contra la violencia en el deporte. Hoy no solo está consolidado e impuesto entre sus principales destinatarios (los estudiantes) sino que recoge la aceptación unánime de diferentes actores públicos y privados que no solo elogian sus resultados sino que hacen parte de los mismos acompañando sus actividades. El reto de construir un cambio cultural -al decir de Bonomi- comienza a hacerse realidad al pasar raya tras estos siete años de actividades ininterrumpidas que lo posicionan en el mejor lugar posible para miles de jóvenes que han participado haciendo de su pasaje por el programa, una experiencia inolvidable.

La diversidad al tope

José Luis Palma es -además del Presidente del Liverpool Fútbol Club- uno de los incondicionales colaboradores de Pelota al Medio que estuvo desde el puntapié inicial. Nunca vaciló en acompañar a un ministro tupamaro como Bonomi, a sabiendas que los unía un objetivo común y la pelota era el medio para alcanzarlo.

Desde el bautismo mismo del programa se abrazó a la idea de acompañar la quijotada y desde entonces no falta nunca a cuanta convocatoria se lo cite, para decir presente y apoyar un programa que está pensado para hacer del fútbol un deporte sin violencia.

Lo que se vivió el pasado 4 de abril en la Sala Zavala Muniz del Solís, fue una muestra inequívoca de un camino virtuoso sin marcha atrás, a sabiendas que lo que depare el futuro siempre será mejor. Para ese objetivo contribuyen muchos actores como Palma, y que no miran color político ni buscan beneficios personales en la tarea. Siete años de confianza acumulada dan pie para decir fuerte y claro un enorme GRACIAS a esos colaboradores de estas iniciativas que se hicieron desde la nada pero que encierran una idea magnífica que invita a acompañarla.

“Ustedes han hecho gala de la diversidad sin restricciones” le comentó al propio ministro Bonomi en ocasión del lanzamiento de la actividad 2017 de Pelota al Medio. Y le asistía toda la razón, pues en esa gala estaba el Arzobispo de Montevideo y Cardenal de la Iglesia Católica, Daniel Sturla, junto al Estudio Posadas, Posadas & Vecino, representado por su Gerente de RRHH Yamandú Castrillón; estaban ANTEL, SUAT, Club Nacional de Fútbol, la alcaldesa del Municipio D, Sandra Nedov, Pablo Caggiani -consejero de Primaria-, y la Secretaría Nacional de Deportes, entre muchos más. Todos incondicionales colaboradores del programa.

Es que no importa a quien votan, importa para quien colaboran y esos son los miles de niños y niñas que participan del programa haciendo el mayor esfuerzo para tener buenas calificaciones en sus estudios (requisito imprescindible para participar). 

El año 2017 lo tendrá nuevamente en movimiento, con la pelota en el medio como argumento para seguir acumulando muchachada y derribar toda barrera entre iguales; para hacer del deporte la excusa perfecta en la construcción de ciudadanía y convivencia.

Desde aquel 2010 tan conflictivo en materia de violencia en el deporte -Pelota al Medio nació como una respuesta colectiva a ese flagelo- a este 2017 en que pareciera comenzar a transitarse una salida al problema, han pasado muchas cosas y este programa ha crecido al punto del no retorno.

Hoy Pelota al Medio tiene músculo, y empieza a generar esas empatías propias de las buenas ideas. Hoy recoge sus frutos y cuenta con experiencias e historias de vida dignas de ser contadas.

Los chicos de Pelota al Medio se identifican por ser buenos estudiantes y potenciales trabajadores (algunos de ellos fueron incorporados a su plantilla por firmas colaboradoras del programa). Hoy las familias agradecen a Pelota al Medio los valores que el programa ha inculcado a sus hijos haciendo de la participación una experiencia que jamás olvidarán.

La pelota seguirá rodando muchos años más, seguramente, cualquiera sea el color político de turno. Es que un programa que hizo de la diversidad un culto tiene asegurada su existencia así como también la sociedad uruguaya tiene en este tipo de iniciativas la esperanza de hacer posible un mejor país para vivir.

Pelota al Medio a la Esperanza es mucho más que una respuesta colectiva contra la violencia en el deporte, es un semillero de nuevos ciudadanos que aprenden a convivir entre distintos y a respetar las diferencias.

La Pelota no se mancha… todo lo contrario, sigue dando rebotes para alegría y disfrute de los jóvenes uruguayos.

el hombre bailó con Mala Tuya,
el perro ladraba atado a una columna del Solís...

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